Cuando veo una
margarita no puedo evitar recordar aquellos momentos de mi infancia cuando me
tiraba horas tatareando: me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere… mientras
iba quitando pétalo a pétalo…lo mejor de todo es que no pensaba en nadie! Y si
lo hacia la verdad es que no lo recuerdo…
La margarita es una
flor que representa sencillez, alegría, lealtad al amor y por eso me parece un
elección maravillosa para decorar una boda! Podemos dar un ambiente campestre y original a
la decoración! Y si además la novia lleva un ramo con estas flores me gustan aún más!
A.D.A
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